Hoy nos
despedimos de esta comarca que tanto nos ha gustado, las expectativas eran
altas y lo que hemos visto ha superado con creces dichas expectativas.
Sabiendo que
regresaremos nos despedimos visitando lo poco que nos quedaba por visitar,
normalmente la gente incluye en el plan de viaje la visita a Hernán, que es un
pueblo castellano abandonado, pero nosotros descartamos esta ruta por la
distancia, no lo veíamos con la niña y el Salto del Nervión, que es la cascada
más alta de España, pero que iba sin agua y ya la vimos cuando estuvimos en
Vitoria hace tres años.
El del hotel
hoy directamente nos mandaba a territorio Arlanza, cerca de Covarrubias, pero
nosotros ya lo visitamos cuando estuvimos en Santo Domingo de Silos.
Al final
nuestro plan de hoy será visitar El monasterio de Santa María de Rioseco,
Almiñe que no estaba programado, pero lo vimos, Briviesca y Villargomez, ese ya
en camino.
Nuestra
recomendación, dos opciones una, llevarse un bocata y comer en el desfiladero o
comer en Briviesca, nosotros optamos por esta última opción, pero nos quedamos
con ganas de haber comido allí, los supuestos restaurantes de la zona son
graciosos, uno mal indicado no le encontramos y otro igual que el resto de la
hostelería de la zona, abren cocina a las 14:00 y antes no abren cocina.
Moraleja, viva el bocata
Empezamos, el
día pintaba algo nublado y fresco, ideal para hacer turismo
Empezamos el
día visitando las ruinas de Santa María de Rioseco.
La web del
monasterio es de las me han llamado la atención y por eso la pongo aquí, porque
el programa de voluntariado para salvar el monasterio está haciendo una gran
labor https://www.monasterioderioseco.com/
Estas son las
ruinas de un antiguo monasterio cisterciense del siglo XIII
Aparcamos en
la carretera y empezamos a subir la colina, no hay que olvidar que son unas
ruinas, hay que ir con mucho cuidado
Pasamos al claustro que es la parte
más fotografiada
Huertos
Me subo para arriba
Vistas
Restos de inscripciones
Compramos un libro para la niña donde
explica cómo era la vida del monasterio y un queso de una quesería cercana
Volvimos y visitamos la torre de los
Fernández de Velasco
Visitamos la iglesia de San Nicolás de
Bari en Almiñe
Lavadero
Casa Torre de Almiñe
Potro de herrar
Tras ver un poco el desfiladero de
Hocinos, nos quedamos con ganas de más pusimos rumbo a Briviesca que fue el
único lugar donde pudimos comer. Afortunadamente en el Restaurante El Fortu
pudimos comer a gusto.
Briviesca no es una desconocida para
mí, pues en el 2006 ya pasé por sus calles mientras hacía el camino de Santiago
Templete musical
Tras comer pusimos rumbo a Villangomez, un bonito pueblo donde han creado una ruta de murales
Además,
tienen un festival, el pollogomez Festival que intenta dar visibilidad a un
gran problema de esta tierra, la despoblación, aquí dejo más informaciónhttps://pollogomezfolk.com/
Aquí
dejo un poco nuestra breve visita
Cartel donde indican donde están, al
quedarme sin batería no pude hacer fotos a todo
Y los murales que me dio tiempo a
fotografiar antes de quedarme sin batería
He visto unos lindos gatitos
Y ahora sin, siguiente parada nuestra
casa. Nos volvemos cargados con las maletas llenas de paisajes verdes, de
flores rosas, de cascadas, de tranquilidad.
Dónde comer:
Nosotros
aconsejamos comer de bocata en el desfiladero, y eso que no escapamos mal
comiendo en el restaurante El Fortu en Briviesca, esta es su web https://restaurantefortu.es/